Nos encontramos ante Erre Punto, un maceración carbónica del 2012 de las bodegas "Remírez de Ganuza". Se trata de un vino joven, fresco y complejo como la gran mayoría de las obras de Pixar.
Acercamos la copa a la nariz y podemos encontrar la dulzura de frutos rojos y negros acomodada en la
complejidad tánica de un vino que deja huella. Introducimos el vino en la boca y
sentimos esa entrada melosa, que nos envuelve la lengua en
terciopelo, evocando nos a las geniales aberturas de películas como
“Up” o “Wall-e”, esas joyas mudas de apenas unos minutos pero
inolvidables en nuestra memoria.
El vino continúa su andadura, redondo, equilibrado e intachable como casi todas estas películas de animación. Finalmente, nos inunda esa retronasal de yogur de fresa y frutos del
bosque, con unos matices lácticos que ya se podían percibir en nariz. Ofreciendo nos una perspectiva madura de aquellas meriendas infantiles, que bien podrían ir acompañadas de películas como "Toy Story", una sensación que se prolonga en una notable persistencia.
Lo cierto es que es un vino con la perspectiva que exige el crítico gastronómico de Ratatouille, Mr. Ego.
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